El presente trabajo se desprende de un proyecto de investigación interdisciplinar radicado en la Universidad Nacional de La Plata, en el que se abordan temáticas vinculadas al cuerpo y a las prácticas que lo toman por objeto. Es en este contexto que nos proponemos analizar el deporte entendiéndolo como un fenómeno moderno, que desde su emergencia puede vincularse a la violencia, tanto en relación a la dinámica interna del juego, como en la serie de fenómenos que tienen lugar alrededor del mismo y que dan forma a lo que podemos entender como campo deportivo. Para llevar a cabo este análisis partimos de algunas de las ideas centrales planteadas por Norbert Elías y Eric Dunning en Deporte y ocio en el proceso de civilización. A partir de esta lectura, nuestro enfoque se centra en dos núcleos problemáticos en los cuales reflexionar: por un lado la distinción entre la violencia asociada al entorno, la violencia propia de la práctica y las posibles articulaciones entre ellas; y por otro, el papel de los medios de comunicación en la interpretación de conflictos y los efectos que produce en el deporte en términos educativos. Consideramos que la violencia, refiere a la acción desprovista de argumentación cuyas consecuencias se manifiestan de manera imprevisible e irreversible. En el caso de los deportes, entendemos que la violencia comúnmente asociada a la dinámica interna del juego, suele confundirse con la violencia vinculada al entorno, esto es, las agresiones entre espectadores, dirigentes, barrabravas, periodistas, e inclusive entre los mismos deportistas. En este escrito pretendemos desarrollar la hipótesis por la que el reglamento es el argumento que fundamenta la acción deportiva, de esta manera, un uppercut, un hand off, una patada, vistos de manera descontextualizada pueden aparentar acciones cargadas de violencia y por lo tanto adquirir una connotación negativa en el imaginario social. En contraposición, sostenemos que en el marco del deporte no sería violencia en tanto acto, sino que se trata de una acción cuyos límites y objetivos se encuentran especificados y contemplados en el reglamento. En ocasiones, la mediatización y espectacularización de los deportes dificulta la diferenciación entre acciones agresivas asociadas al juego y hechos violentos vinculados al entorno e incluso al juego mismo.