El presente trabajo describe las principales características de la política pública de reconocimiento de aportes por tareas de cuidado recientemente implementada por la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) a partir del DNU N° 475 del 17 de julio de 2021. Asimismo, incluye una revisión del documento “Impacto de las brechas de género en el acceso a la seguridad social” , publicado por la ANSES y cuyas principales conclusiones funcionaron como fundamento para el diseño de la mencionada política. En él, y como parte del diagnóstico del estado de situación, se llevó a cabo la caracterización de la problemática de las brechas de género en el mercado de trabajo y en el acceso desigual a la seguridad social. Al analizar las brechas de género a la luz de las políticas de seguridad social implementadas en las dos décadas pasadas, se observa su capacidad para generar efectos positivos de largo plazo en la disminución de desigualdades y en la universalización de los niveles de inclusión a distintas prestaciones de seguridad social. Especialmente, a partir de los Planes de Inclusión Previsional implementados mediante las moratorias de regularización de aportes. Sin embargo, también puede observarse en los años recientes, una desaceleración de ese impulso, en especial para las mujeres mayores, que quedaron en una zona de creciente desprotección a partir de la pérdida de efectividad de las moratorias que siguen vigentes, y del requisito que exige 65 años de edad para acceder a la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM). Las medidas implementadas a raíz de la pandemia de COVID-19, renuevan los interrogantes por la necesidad de aplicar políticas de ampliación de derechos, con la vocación de profundizar la disminución de desigualdades, entre ellas, las de género. En este contexto, la novedosa política de reconocimiento de aportes por tareas de cuidado pone en diálogo los procesos de diseño y construcción de políticas públicas a la luz de nuevas urgencias y viejas desigualdades estructurales.