En una sociedad patriarcal que propone la supremacía masculina, ser una artista mujer parece ser un acto de rebeldía para la sociedad jujeña. En este trabajo se encuentran las entrevistas de dos artistas mujeres, Liliana Berruezo y Bry Angel, que han logrado legitimar sus trabajos desde dos áreas diversas, una trabaja materiales regionales para hacer esculturas mientras que la otra trabaja la sexualidad desde el yaoi, construyendo nuevos espacios en el que las mujeres pueden experimentar su desarrollo artístico. Es menester tener en cuenta que como metodología de trabajo primeramente se realizó una entrevista a las artistas seleccionadas, con un punto de interés en sus obras, lo que nos lleva a reflexionar sobre los roles de la mujer en el arte jujeño, y mostrar trabajos de artistas “escondidas” obligadas al cuentapropismo - consecuencias de una fuerte neoliberalización - en una sociedad machista y heteronormada.