“El motivo de mi trabajo en el tratamiento del delito de violación responde a diversas razones. Desde las últimas modificaciones legales introducidas en materia de delitos sexuales, fundamentalmente por las modificaciones de las leyes 19.617 y 19.927 en nuestro país, se reestructuran los tipos penales existentes, sea ampliando las figuras comisivas, especificándolas, estableciendo sistemáticas diversas o bien derechamente eliminando ciertas figuras (…) Por lo demás, los temas relativos al delito de violación, aun cuando muchos de ellos vengan caminando un largo derrotero en la discusión iuscientífica, siempre pueden ofrecer nuevas tratativas, sobre todo con motivo del desarrollo y evolución de la ciencia penal que introduce nuevas visiones” (Introducción, Edison Carrasco Jiménez). “En este complejo terreno político-criminal se asientan las normas analizadas en el texto por Edison Carrasco Jiménez. Si bien poco más parece hacer falta para destacar la oportunidad y la idoneidad del tratamiento de la materia, el libro cuenta con otra virtud innegable. El autor se detiene en el análisis de los aspectos más relevantes de materia normativa estudiada (…) No rehúye la interpretación gramatical de las novedades normativas, resuelta con una profundidad analítica harto infrecuente, pero, como expresión de una cierta tradición roxiniana, se preocupa de atender a las premisas teleológicas de la labor hermenéutica. Desde esa posición metodológica, el autor da respuesta a las dudas más relevantes de la actual regulación chilena sobre los delitos de violación” (Prólogo, José Angel Brandariz García).