En esta presentación abordaremos una categoría analítica que hemos elaborado para referir a un tipo particular de violencia social ejercida desde los medios masivos de comunicación en convergencia con las actuales TICs; nos referimos a la categoría abuso mediático. Presentaremos esta categoría y analizaremos su funcionamiento en un corpus de noticias sobre hechos conmocionantes que -consideramos- muestran un tratamiento mediático abusivo y violento. En particular, nos detendremos sobre el comportamiento de la agenda mediática, las operaciones discursivas que construyen sentidos sobre sujetos y poblaciones mediante estigmatizaciones, subalterizaciones, descalificaciones y demás operaciones negativizantes; y sobre el tratamiento de las imágenes que componen las noticias. A su vez, relacionaremos el tratamiento mediático con el ejercicio profesional y el respeto -o vulnerado- de derechos consagrados. En nuestro análisis nos detendremos en aquellas operaciones que mediante el exceso de detalle y la visibilización transforman en espectáculo la intimidad y ciertos hechos traumáticos, conmocionantes, etc. Esas operaciones colocan al lector en una posición de voyeur que avergüenza -ofreciéndole también sobradas descripciones e informaciones fútiles-. El exceso de detalle perturba, incita a la conmoción aunque no siempre a la empatía. ¿Se trata esta operación solamente de cierta indiscreción del medio? ¿O es, más bien, una falta de sensibilidad ética? O bien ¿constituye una denuncia del medio ante las condiciones de vida? Al respecto Susan Sontag explica: “El afeamiento, mostrar de algo su peor aspecto, es una función más moderna: didáctica, incita una respuesta activa. Para que las fotografías denuncien, y acaso alteren, una conducta, han de conmocionar” (2004: 36). Y la autora citada -en preguntas abiertas y nunca cerradas a reformularse- problematiza sobre la exposición de los públicos a imágenes repetidas que conmocionan. Con insistencia entonces nos preguntamos qué saberes aportan las imágenes fotográficas en el corpus de noticias que presentaremos a la comprensión de situaciones. ¿Interpelan al receptor? ¿Indignan? ¿O, como plantea Sontag, forman parte de una “normalidad” que promueve el consumo a través de la perturbación o compasión? Referencia: SONTAG, Susan (2004) Ante el dolor de los demás. Buenos Aires, Alfaguara.