Uno de los ejes de trabajo previsto para nuestro proyecto de investigación en el presente bienio era la problematización del proceso de creación de una puesta en escena para la ópera experimental Memorias del Camino (Flora Frete, 2018), con preestreno musical en 2019, cuya realización estaba agendada para agosto de este año. Cuando sobrevino la pandemia nos encontrábamos en instancia de intercambio creativo con la regisseur Valeria Urigu en torno a elementos de la narrativa característicos de la obra: su hibridez, su estructura formal fragmentada, su ausencia de dramaticidad. También aquellos aspectos materiales de la realización sonora determinantes para muchas decisiones escénicas como la performance vocal del narrador y la necesidad musical de incluir a la directora y al conjunto instrumental en la escena. La reprogramación forzosa del estreno propició una profundización de las reflexiones con la inclusión de la compositora en los intercambios, sumando la consideración de otras producciones y la consulta de bibliografía. Esta comunicación ofrece una síntesis de las búsquedas al momento presente y propone una mirada sobre Memorias del Camino como parte del proceso de reconfiguración de la narrativa en la ópera contemporánea (Uno Everett, 2015)