Se advierte en la organización de El Victorial, crónica-biografía de Gutierre Díez de Games que narra la vida y hazañas de Pero Niño, conde de Buelna, una diferencia en el tratamiento de la materia narrativa que conforma el Prólogo o Proemio respecto de la del Tratado propiamente dicho. Mientras que este último se circunscribe a los lineamientos generales trazados por la retórica para el género demostrativo (en este caso la alabanza hacia Pero Niño, con la descripción de las circunstancias externas –linaje, educación, riqueza. etc.-, así como las cualidades positivas referidas a cuerpo y espíritu), advertimos que el Prólogo abunda en una variedad de registros discursivos provenientes de la escolástica, la historia sagrada, las crónicas, etc., que densifican el pasaje dificultando o más bien retrasando la lectura del mismo. Consideramos que tal densa heterogeneidad hace del Proemio un lugar cargado de sentido que marcará el rumbo en la interpretación del texto.