Profesionales de distintas disciplinas de un Centro de Salud Mental, en un intento de repensar nuestra práctica e inventar nuevos modos posibles de habitar la institución, nos planteamos cómo trazar una práctica clínica colectiva. Lo colectivo se crea y se sustenta en la diferencia, arma vinculo. Pensar y participar de estas experiencias de trabajo comunitarias se constituye en un acto de resistencia creativa, ante los avatares que implica el trabajo en el hospital. El presente trabajo relata las experiencias y algunas aproximaciones conceptuales surgidas de un proyecto de trabajo entre el CSM N3 Ameghino y el bachillerato popular Maderera Córdoba, una escuela secundaria orientada en Cooperativismo que ofrece una alternativa de estudio sistemático a adolescentes y jóvenes que –en su mayoría- han sido desalojados de las escuelas tradicionales. El proyecto, que llamamos Laboratorio Creativo, consiste en la realización de talleres abiertos centrados en el proceso de producción lúdico y creativo anclado en el uso de soportes diversos. La propuesta apunta a ofrecer un espacio para la creación poniendo énfasis en lo comunicable y transmisible, como un modo de construcción intersubjetiva, que haga lugar a la singularidad en una producción colectiva. Palabras clave Salud mental, Adolescencia, Educación, Salud comunitaria ABSTRACT HEALTH / EDUCATION INTERSECTIONS Professionals from different disciplines of a Mental Health Center, in an attempt to rethink our practice and invent new ways of inhabiting the institution, we set out how to draw up a collective clinical practice. The collective is created and sustained in the difference. Thinking and participating in these experiences of community work is an act of creative resistance, given the vicissitudes of working in the hospital. The present work relates the experiences and some conceptual approaches arising from a project of work between the CSM N3 Ameghino and the popular high school Maderera Córdoba, a secondary school oriented in Cooperativism that offers an alternative of systematic study to adolescents and young people who have been expelled from traditional schools. The project, which we call Creative Lab, consists of the realization of open workshops centered on the process of creative production anchored in the use of diverse supports. The proposal aims to offer a space for creation with an emphasis on the communicable and transmissible, as an intersubjective mode of construction, that makes room for the singularity in a collective production. Key words Mental health, Adolescence, Education, Community health